Muchos trabajadores dicen que la preocupación sobre la piel no es de las más importantes en su lista de prioridades; sin embargo, las personas que trabajan al aire libre corren un gran riesgo de desarrollar cáncer de la piel como resultado de la exposición excesiva a la radiación ultravioleta (UV).

Trabajar en la cercanía de superficies o equipo reflector o caliente aumenta el riesgo de exposición excesiva a los rayos del sol. Las horas más peligrosas del día son entre las 10 a.m. y las 3 p.m., cuando los rayos del sol son más intensos. Si debe estar en el exterior durante estas horas, observe las siguientes precauciones:

  • Use un protector contra los rayos del sol, no use un protector de cualquier clase, sino uno con un factor de protección solar (sun protection factor: SPF) mínimo de 15. La Sociedad Americana del Cáncer recomienda que, 20 minutos antes de salir al exterior, se aplique protector contra los rayos del sol en todas aquellas superficies del cuerpo que no estén cubiertas con el pelo, un sombrero o la ropa. Si suda profusamente o trabaja cerca del agua, utilice un protector a prueba de agua y aplíqueselo periódicamente.
  • Cúbrase las áreas expuestas. Las temperaturas sofocantes pueden hacer que se le olvide protegerse contra el sol. Muchos trabajadores se quejan que es demasiado caluroso para usar pantalones y camisas de manga larga, y deciden usar pantalones cortos, camisetas sin mangas o andar sin camisa. El cuerpo de las personas que no se protegen con suficiente ropa es más susceptible a las quemaduras del sol. Para ayudar a prevenir quemaduras, use ropa ligera, de tejido cerrado y colores opacos.
  • Debe usar un sombrero de seguridad de ala ancha para proteger su cabeza y cara contra los rayos directos del sol. El sombrero debe proteger la punta de las orejas, el cuello, las sienes y la parte inferior de la cara. Un pañuelo alrededor del cuello proporciona mayor protección.
  • Use gafas de sol. Frecuentemente las personas que trabajan al aire libre subestiman el daño que los rayos UV producen a los ojos, sin saber que éstos son seis veces más sensibles que la piel a la radiación ultravioleta. Las gafas de sol u otro tipo de protección ocular es una necesidad. La luz ultravioleta aumenta el riesgo de que se desarrollen cataratas y fotoqueratitis (inflamación de la córnea). Asegúrese de usar gafas de sol que bloqueen los rayos UV. Este tipo de protección es particularmente importante cuando se trabaja cerca del agua.

Incluso en los días nublados, las personas que trabajan al aire libre corren el riesgo de exponerse excesivamente a los rayos ultravioleta del sol. Las nubes, el viento u otras condiciones climáticas, y las superficies brillantes o reflectoras como agua o metal intensifican el poder del sol para quemar la piel. Si diariamente presta atención al pronóstico sobre la intensidad solar y toma las precauciones adecuadas, puede mantenerse seguro mientras trabaja bajo el sol.