Ciertas ocupaciones, tales como cuidadores, entrenadores, trabajadores de rescate y veterinarios, pueden hospedar animales como gatos y perros. El manejo de los animales, su comportamiento impredecible, y las operaciones repetitivas como tareas de limpieza, alimentación y tratamientos implican que los trabajadores requieren capacitación, los equipos apropiados y buen diseño del local, al igual que prácticas seguras de trabajo.

Antes de tocar a un animal, evalúe su estado de salud, nivel de estrés y lenguaje corporal. Un animal manso se puede volver agresivo si usted lo sorprende, por lo que usted debe protegerse a sí mismo y al animal usando equipos de protección personal y herramientas para manejo de animales. Al trabajar con gatos, use mangas largas y guantes de puño largo para protegerse los brazos. Use los guantes apropiados para protegerse las manos y los dedos contra pinchazos (por los dientes filosos del gato) o trituración (mordidas de perros grandes). Lávese bien las manos durante todo el día y antes de comer, beber o al terminar su trabajo.

Use herramientas de manejo, tales como traíllas o correas para mover o ejercitar perros mansos. Las pinzas para gatos mueven humanitariamente a los gatos agresivos o salvajes. Una vara con lazo en la punta mueve a los animales mansos o agresivos, manteniéndolos alejados de usted. Sujete a los animales con ganchos en el collar o en su jaula antes de soltarlos. Considere el uso de un bozal si es necesario manejar a un animal de cerca para un examen médico o para darles tratamiento.

Para evitar mordidas y arañazos, nunca se apoye sobre una jaula, ni camine cerca o coloque los dedos o la cara cerca de una jaula. Idealmente, las puertas de las jaulas se deben abrir hacia afuera para evitar quedar atrapado dentro de una jaula o ser aplastado entre la puerta y su marco en caso de que un animal se lance contra la puerta. Comunique el peligro de un animal agresivo con avisos en la jaula y una advertencia en el expediente del animal.

Durante los tratamientos médicos, ate al animal a la mesa de examen o al nivel del suelo. Antes de darle una inyección, sujete al perro en una jaula plegable para tratamientos o átelo en varios puntos. Use un escudo o barrera transparente en la jaula para dar inyecciones a los gatos. Para animales muy agresivos, use una vara con lazo para dar inyecciones. Sepa dónde tiene las manos durante la inyección. Use protección para los ojos y una careta para evitar las salpicaduras. Tenga cuidado con las agujas; nunca trate de ponerle tapa a las agujas ni romperlas. Coloque las agujas usadas en un recipiente apropiado.

Prepárese para movimientos inesperados de los animales que puedan empujarlo o tirar de usted y causar esguinces o torceduras. Párese con los pies separados para tener mejor estabilidad. Póngase botas de seguridad o zapatos con suelas antideslizantes para tener mejor tracción y protección contra los animales pesados. Al transportarlos o darles tratamiento, sujete firmemente a los animales pequeños y mansos, y tan cerca de su cuerpo como sea posible. No levante a los animales grandes, use rampas para meterlos a la jaula, o subirlos a un camión o una mesa de examen.

Un buen diseño del local puede prevenir lesiones. Superficies tales como el acero inoxidable, superficies sólidas o Formica, son lavables y fáciles de desinfectar. Use superficies antideslizantes en los pasillos. Póngale ruedas a las jaulas que tienen que moverse con frecuencia. Las jaulas sobrepuestas con compartimientos sellados y charolas para los desperdicios que se pueden quitar reducen el tiempo necesario para su limpieza y evitan el goteo y la contaminación. Los tazones para agua y comida que se enganchan a la jaula evitan que se volteen. Los tazones para agua con llenado automático reducen la necesidad de llenarlos con frecuencia. Para sacar los desperdicios de las áreas de jaulas, considere canales que se puedan lavar con agua de una manguera con boquilla.